Ilusión y sueños en Arte, Cine y Publicidad

Enfoque

El término ilusión, por sus características, ha sido amplia y comúnmente relacionado con el mundo de los sueños o diversos estados de ensoñación. El fenómeno de la ilusión es utilizado por el ser humano como vía de escape, estableciendo una realidad alternativa que protege al sujeto de las posibles adversidades. Los sueños, por su parte, son aquel lugar en el que la ilusión se escenifica, sirviendo de reflejo tanto del deseo como del miedo, proyectando de igual forma aquello que anhelamos y nos aterra.

El arte tiene la capacidad de recrear la ilusión y el surrealismo, jugando con la percepción, pero también presentando paisajes oníricos como forma de escape o evasión de la realidad. Por otro lado, la representación cinematográfica traslada los recursos estilísticos y narrativos del arte a un lenguaje audiovisual, ofreciendo una experiencia más inmersiva. De forma paralela, la publicidad, utilizando un soporte cada vez más cinematográfico, recurre al fenómeno de la ilusión, generando en el espectador la capacidad de percibir la ficción proyectada como una posible realidad, que escapa a las disconformidades de la cotidianidad.

En esta investigación analizaremos el fenómeno de la ilusión y los sueños. También estudiaremos cómo son tratados desde el mundo del arte, el cine y la publicidad y su implicación para el ser humano occidental posmoderno. Todo ello se realizará desde diversas fuentes de conocimiento, como son el campo de la lingüística, la sociología y el psicoanálisis. Del mismo modo, examinaremos los recursos y elementos, tanto formales como discursivos, a la hora de representar dichos fenómenos. En el campo cinematográfico, los géneros principalmente implicados serán el surrealismo y la fantasía. En cuanto a la publicidad, el estudio se basará, en su mayor parte, en aquella orientada al sector del perfume, por su capacidad de recrear escenarios ilusorios, mostrando a sus personajes en entornos oníricos y situaciones utópicas.

La ilusión y los sueños pueden servir como fuente de disfrute o vía de escape, proponiendo realidades alternativas. Varios elementos y discursos se repiten en arte, cine y publicidad. Podríamos decir que, de un modo u otro, dichas disciplinas pretenden ofrecerse como alternativa a la realidad del sujeto. La metáfora, la distorsión del espacio y el mundo onírico son expuestos por el imaginario visual y el mundo publicitario, a modo de reclamo de un consumidor cada vez más disconforme con su situación. Una situación impuesta por un sistema al servicio de la imagen y los medios de comunicación.